Seamos sinceros, siempre que elegimos un cuento para contar en clase/casa/cualquierlado lo primero en lo que nos fijamos es en los dibujos. Y es que en cuento a álbum ilustrado la importancia del ilustrador es la misma que la del autor de la historia.
Cuando empecé el ciclo ni me había planteado que pudieran existir cosas tan bonitas como los álbumes ilustrados. Ni sabía que a los niños les podría gustar algo diferente a los míticos cuentos troquelados...si hasta les habían recortado la forma del dibujo, ¡qué detalle!
Pues mis primeras ideas sobre cuento infantil se basaban en unas ilustraciones muy básicas, algo sencillo para que las niñas y niños pudieran centrar su atención. Pocoyó estaba bien, fondo blanco y colores vivos, venga.
Pero al llegar a segundo de ciclo, que fue cuando no metimos de lleno en el mundo de los álbumes ilustrados... que locura todo. Ilustraciones básicas pero preciosas, colores, blanco y negro, otras más elaboradas... Esta es una forma artística creada específicamente para los más pequeños (y para los grandes que disfrutamos con ella) y no deberíamos racanear con su calidad.
Pues hoy quiero enseñaros a mi ilustrador favorito del mundo mundial (al menos de los que conozco por ahora): Roger Olmos.
Podéis conocer obras de él como "El cuadro más bonito del mundo", "Tío Lobo", "La cabra boba" o "Andrés Cabeza abajo". No sabría decir porqué me gusta, pero me encanta...yo que se... es muy surrealista, fantástico... no se, te lleva a otro mundo.
Pues nada, sólo quería invitaros a que vierais su trabajo porque la verdad es que merece la pena. Os dejo AQUÍ su blog para que le echéis un ojo y a seguir disfrutando de los cuentos infantiles, que se que muchos mayores (como yo) os los compráis para vosotros y no para los niños.
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